martes, 2 de octubre de 2007

Chapter 2
Decidió seguir a pie el recorrido, tenía viejas costumbres pero no tenía nada planeado.
Se encontró a una mujer de cabello largo y esponjado, era de la alta alcurnia de esas que no se les ve en el mercado. El viejo, cortésmente dijo buenos días con un ligero agachado, la mujer no contestó el saludo, no se acostumbra en su mundo.
Ella le preguntó en un tono salado si por su actitud de vagabundo no era ya un tarado, pero el viejo vagabundo se quedó callado. Sabía dentro de sí que a su lado no tenía una persona natural sino lo que tenía lo tenía comprado.
Fue entonces que empezaron una larga conversación, complicada en tema pero sabia en demostración, ambos sabían demasiado, lo que el viejo sabía de la vida, la vida se lo habría enseñado y lo que ella repetía de un libro fue memorizado.
Poco a poco esta charla subió de entonación y sólo por ella el viejo demostró educación. Él le dijo demostrando sus conjeturas con ejemplos en forma de parábolas, pero a ella se le hicieron absurdos y le dijo esas son pendejadas, y así se retiró. Diciéndole eres un pendejo y se dio la vuelta, fue entonces cuando el viejo desconocido se acordó de lo que algún tiempo atrás le dijo su amigo el poeta Antonio Machado: "Tu profesía poeta. Mañana hablarán los mudos: el corazón y la piedra."

Ps. se quedó pensando, si tan sólo viviera lo que ha leído y no sólo lo dijera. Si tan solo............

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